La Dirección de Seguridad comunal de Pringles procedió a cumplir con el trámite de destrucción de casi 70 caños de escapes “no habilitados” y retenidos por ser causantes de ruidos molestos.
La medida se realizó en razón que el Municipio recepciona periódicamente denuncias por ruidos molestos y, en la mayoría de los casos se detecta durante los Operativos de Control de Tránsito que los decibeles superan los niveles permitidos, en esos casos, se procede a la confección del Acta de Infracción y a la retención preventiva del vehículo.
Estos caños de escape “modificados” producen ruidos molestos que infringen el Código de Tránsito y la Ley Nacional de Tránsito y, es por ese motivo que, luego de abonar la multa correspondiente y, para poder hacer retiro del vehículo retenido, se solicita el reemplazo de caño de escape por uno considerado reglamentario.
En la oportunidad el Director de Seguridad Municipal, Hugo Lanezán clarificó: “Se va a realizar una compactación de caños de escape modificados de motos que han sido secuestradas desde el año pasado, en conjunto con Guardia Urbana y Policía. La idea es terminar con los ruidos molestos que contaminan el ambiente”.
“Tenemos para destruir alrededor de 65 escapes de motos y hay algunos de autos también”. Consultado sobre qué aconsejaría a los motociclistas, destacó el funcionario: “Que utilicen el caño de escape original, que ya está reglamentado y que desde la fábrica sale así, pero la gente los modifica para que hagan más ruido”.
“Una vez secuestrada la moto, el propietario para retirarla tiene que venir con el escape original, se lo coloca y una vez colocado se le restituye la moto. Además, los caños de escape son muy costosos, estamos hablando entre 30 a 35 mil pesos”.
Por su parte la Abogada Candelaria Pereyra amplió: “La medida se realiza en base a la Ordenanza N°4765, de febrero de 2022, con la idea de poder controlar cuestiones de tránsito, sobre todo moto vehículos, por la contaminación auditiva y se puedan eliminar estos escapes que se encuentran libres y poner el original.”
“Los moto-vehículos que no cumplen con la Reglamentación, son secuestrados y luego de presentar la documentación correspondiente que acredite la titularidad y todos los requisitos, pueden retirar el vehículo”.
Apuntó, además: “Estos escapes que se compactarán son los que no cumplieron con la normativa. Seguramente van a tener su sanción en el Juzgado de Faltas, además por la contaminación auditiva que produce y así lo estable la Ordenanza municipal, y la Ley Nacional”.
Vale reiterar, que estos caños de escape producen ruidos molestos que infringen el Código de Tránsito y La Ley Nacional de Tránsito, y es por ese motivo, que luego de abonar la multa correspondiente y para poder hacer retiro del vehículo retenido, se solicita el reemplazo de caño de escape por uno considerado reglamentario.

Fuente: El Orden de Pringles